EL DOLOR ME LLEVA A CERRAR LOS OJOS

Hoy me siento triste e intento olvidarte

Y cuanto más lo intento sólo logro recordarte

Las peleas de antaño me han curtido

Me amargo, rio y lloro por lo vivido

Nuestro amor lentamente se oscureció

 Toda promesa de antaño se desvaneció

Contigo aprendí que el amor duele

Y que también olvidar se puede y suele

Arrancarte de mi piel, de mis memorias y mi alma

Fue una cura que trajo una momentánea calma

Tener que aceptar que te he perdido

Y el saber de ti es un consuelo que no olvido

Te perdí e intento olvidarte por mutuo acuerdo

Aquellas pláticas en medio del silencio es un recuerdo

El dolor me lleva a cerrar los ojos

Es cuando recuerdo una horchata por antojo

Acciones propias  separaron nuestro camino

Las mías reaccionaban sin que me importe un comino

Como un niño resentido y engreído

Buscaba tu amor de madre y sentirme protegido

La vida golpea como las olas a las rocas

Y las cuartea y erosiona de a pocas

Los sentimientos están en el fondo de la mar

Más no se ahogaron salen a flote a la par

Pensarte es volver a sentir y vivir

Verte me incita a sonreír y sufrir

Ahí descubro que el olvidarte es una mentira

Porque vuelvo a escuchar la melodía triste de tu lira

Tu melancolía que solo yo interpretaba

Decirte las palabras adecuadas que esperabas

Lograste escanear mis sentimientos

Conociendo totalmente mis cimientos

Tus detalles me sentenciaron a siempre evocarte

Me arrepiento del tiempo perdido por obviarte

Mi orgullo es una mentira disfrazada

Mi indiferencia una estúpida encrucijada

Sé que piensas en mí en tus noches tormentosas

Yo extraño tu sonrisa y tu ausencia vanidosa

Porque me enseñaste a no amar con los ojos

Que Dios es grande y con fe se cumple los antojos